Opinión

Published on febrero 13th, 2021 | by lavozsur

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*Los Sucios Intereses Detrás de la Toma de Morena

1.- En la lluvia de candidatos para puestos de elección popular que tiene Morena hay dos vertientes: primero están los oportunistas que solo quieren seguir viviendo del presupuesto gubernamental y por ello se mudan a Regeneración Nacional, y luego, los grupos de poder que por años han manipulado la política estatal en beneficio de las grandes empresas.

Son por un lado esos individuos que no saben hacer otra cosa que vivir a costa del erario público y que de una u otra forma logran colarse a puestos de elección popular; no importa su pobre desempeño ni los resultados que ofrecen a la ciudadanía, es simplemente un modus vivendi bajo el argumento de una falsa vocación de servicio.

Por otro lado están las grandes empresas de Jalisco, esas que por años han recibido millonarios apoyos y financiamiento a fondo perdido tanto del Estado como de la federación, pero que en los últimos tres años han visto reducidos esos ingresos y quieren que las cosas vuelvan a ser como antes.

Por ello, de todas las corrientes ideológicas le están mandando candidatos a Morena, pero es a final de cuentas, un caballo de Troya al que si le abren la puerta les va a derrumbar ese triunfo del 2018 que tantos años les costó conseguir.

Y es que el hecho de que el partido de la esperanza tenga más de 2 mil precandidatos a puestos de elección popular como presidentes municipales, diputados locales y federales no es casualidad; en Jalisco para la elección del próximo 6 de junio solamente dos partidos tienen posibilidad de triunfo, son Morena y Movimiento Ciudadano; el resto quizá consiga solamente unos cuántos municipios y curules en los Congresos.

2.- Hoy más que nunca los políticos están actuando de forma descarada y hasta ofensiva para el electorado; pues es inconcebible que se estén presentando aspirantes a puestos de elección popular que en sólo 5 años han pasado ya por tres partidos y en el Sur de Jalisco son especialistas en ello…

Están por ejemplo varios presidentes municipales que pasaron del PRI al MC, luego a Hagamos o a Morena; están precandidatos que han sido panistas, luego emecistas y ahora se ponen la camiseta de morenistas pero lo cierto es que no son más que lobos que se quieren colocar un disfraz de oveja para seguir viviendo del erario.

Basta echarle un ojo a los políticos regionales que han cambiado de partido y analizar su desempeño: Luis Carlos Leguer ha sido panista, emecista y ahora busca ser de Morena; Lino Hernández se estrenó en el PRI y ahora quiere gobernar por Morena; Héctor Díaz también era priísta y ahora busca la alcaldía por Fuerza México; el alcalde de Pihuamo Juan Alcaráz llegó por Morena y ahora quiere repetir por Movimiento Ciudadano; la alcaldesa de Gómez Farías llegó al poder representando al PRI, luego quería repetir por MC y finalmente será candidata por Hagamos; el regidor Alejandro Barragán fue fundador de Movimiento Ciudadano en Zapotlán y luego le cerró el ojo al PAN, a Encuentro Social y acabó siendo candidato por Morena; en Hagamos, sus 5 precandidatos provienen del PRI, del MC y del PRD; Jaime Chávez que era priísta y ahora quiere ser alcalde por Morena; Agustín Jaime Ávalos que era emecista y también se quiere mudar a Morena, al igual que Jaime Ríos que era emecista y se pasa a Morena para repetir como  alcalde de Gómez Farías y así la lista es interminable, pues en todos los partidos nuevos se están mudando aquellos donde creen poder obtener algún beneficio.

El caso más alarmante y descarado está en el Congreso de Jalisco, donde 30 de los 38 diputados locales van a dejar su cargo para irse a buscar una candidatura… y por eso, en la próxima contienda hay que preguntarles a esos lobos vestidos de oveja cuál fue su desempeño como servidor público; cuántas faltas tuvo en dos años y medio a las sesiones de cabildo o del Congreso; cuántas iniciativas presentó y cuál fue el beneficio de su gestión para la sociedad, además de obligarles a fincar un compromiso de no dejar el cargo para andar de chapulines.

Habría que preguntarse entonces si aceptar los despojos políticos de otros partidos está dentro del proyecto de nación que propuso Andrés Manuel López Obrador y sobre todo de los principios que tanto pregonan de No Mentir, No Robar y No Traicionar, pues con la inscripción de personajes que han estado en Ayuntamientos y Congresos desde hace varios años, solamente podemos esperar que sigan las corruptelas, los malos manejos y los pobres resultados.

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