Punto por Punto; Sábado 11 de agosto de 2018
*Policías que no cumplen sus funciones
El asunto de la seguridad pública en nuestro municipio cada vez está más deteriorado y tal parece que a la autoridad municipal no le interesa enderezar el barco; más allá de los alarmantes temas de violencia, hay un sinfín de delitos patrimoniales en los que evidentemente la falta de vigilancia en las calles es lo que da manga ancha a los delincuentes para hacer de las suyas.
Y es que por las noches Ciudad Guzmán se torna una tierra de nadie, donde los delincuentes pueden impunemente subir a las azoteas de las casas para robar la tubería; abrir un vehículo estacionado para llevarse las pertenencias o entrar a los negocios para sustraer la mercancía y los objetos de valor.
Cuando las personas afectadas se dan cuenta que han sido víctimas de un delito patrimonial, lo primero que hacen es reportar lo ocurrido a la Dirección de Seguridad Pública Municipal, se toma el reporte y tras una larga solicitud de datos personales la telefonista asegura que de inmediato llegará una patrulla, lo que nunca ocurre pues las unidades tardan hasta dos horas en hacerse presentes.
Es por eso que además de haberse convertido en víctimas de la delincuencia, ese tipo de situaciones incrementan aún más el enojo de la ciudadanía, pues se ven indefensos ante una situación de inseguridad que en los últimos años se ha venido incrementando y que es claro a las autoridades municipales no les interesa corregir.
Eso sí, empezando por el titular de la dependencia, Andrés Galván García, y los comandantes a su cargo, en vez de vigilar las calles hacen funciones de guaruras de los altos funcionarios del Ayuntamiento; patrullas vigilando las casas del alcalde y los regidores, elementos siguiéndoles de cerca en los eventos públicos mientras que las calles quedan a merced de los amantes de lo ajeno.
Se les ha repetido hasta el cansancio pero no lo quieren entender, su función es prevenir los actos delictivos, vigilar las calles y cuidar a la ciudadanía, para eso se les paga y no están cumpliendo con esa obligación cuya consecuencia principal es un pueblo que ya vive preocupado porque en una noche le dejen vacía su casa y la menos, que le roben hasta las macetas.
No debemos olvidar que Ciudad Guzmán ha alcanzado primeros lugares a nivel nacional en extorsiones, que somos el municipio sureño con mayor número de homicidios en lo que va del año y en lo que respecta a delitos patrimoniales no se están reflejando en estadística pues la gente ya se cansó de denunciar sin que haya resultados; estar vuelta y vuelta en las oficinas de la Fiscalía Regional se torna en un suplicio y por ello los afectados prefieren resignarse a la pérdida de sus bienes. Parece que la policía municipal está buscando lo mismo.
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